lunes, diciembre 30, 2024
lunes, diciembre 30, 2024

Fortalecer los músculos pelvianos después de los embarazos es importante

pelvis
El piso pelviano es una de las zonas que más se debería fortalecer en las mujeres durante y después de un embarazo. Si bien es una afección que perturba mayoritariamente a este género, es un problema que también sufren los varones. En estos momentos se habla más al respecto, pero aún el tema genera pudor, “asociamos estas alteraciones a la edad, y culturalmente la juventud tiene un lugar preponderante por lo que se trata de ocultar la temática” señala la Lic. Obst. Elba Malmierca. A pesar de ello, las estadísticas muestran que un 25% de las personas que padecen estas alteraciones son jóvenes de entre 20 y 30 años (www.infogen.org.mx.).

El periné, piso pelviano o diafragma pélvico es un conjunto de músculos y ligamentos que cierran la cavidad abdominal en su parte inferior, gráficamente “es como ´un puente colgante´ que se sostiene de los huesos de la pelvis y, que contienen a la vejiga y uretra (sistema urinario), el colon descendente y recto (sistema digestivo), y en las mujeres el útero y la vagina (sistema reproductor)”, explica la Lic. Obst. Elba Malmierca.

Fuente: Periné femenino y el parto. Blandine Calais-Germain y Nuria Vives.
Este “puente” tiene “un piso” donde se encuentran músculos importantes que cumplen la función de sostén y, a su vez, deben ser elásticos debido a que es una zona de paso; por tal motivo “es importante que estas estructuras mantengan un buen tono muscular que, muchas veces, se pierde”. Los factores que intervienen en la pérdida de tonicidad muscular varían entre las constipaciones crónicas, la tos crónica, los deportes de alto rendimiento, los partos vaginales, y el ser fumadores/as; además, al ser el cuerpo un todo, influyen también la respiración y la postura corporal de cada uno.

La hipotonía, es decir la disminución de la tensión muscular, ocasiona trastornos que no tienen riesgo de vida, pero influyen en la calidad. Según Malmierca, algunos de los desórdenes más frecuentes son: la incontinencia urinaria, la retención de orina, la laxitud de la vulva, el Vaginismo (hipertonía vaginal), las disfunciones sexuales, la incontinencia Fecal y los prolapsos. “Alguna de estas alteraciones influyen en la calidad de vida, en la sociabilización, en la relación con los otros, ya que, afecta todos nuestros hábitos, desde la ropa que usamos hasta el cómo caminamos”, señala la licenciada en obstetricia.

Por eso, es recomendable que frente a algún cambio se estudie y trate con profesionales. El objetivo fundamental es mejorar la calidad de vida de las personas, “hay ejercicios específicos sobre la musculatura pélvica, que, junto a un control de peso, ingesta adecuada de líquidos y prevención del estreñimiento pueden reducir hasta en un 80% la incontinencia urinaria”. Además, “existen distintas gimnasias musculares para realizar, desde los ejercicios de Kagel, hasta los hipopresivos del fisioterapeuta Marcel Caufriez, y el método de Blandine Calais- Germain y Nuria Vives que indican una serie de actividades que se incorporan en la vida cotidiana”, resume Malmierca.

En este sentido la licenciada considera que es fundamental tener una actitud proactiva y positiva, y señala que, “realmente se logran mejoras muy importantes”.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Últimas noticias