Son el primer eslabón de una cadena fundamental: la de prevención de enfermedades zoonóticas y el trabajo con la comunidad. El Colegio de Veterinarios de la Provincia de Buenos Aires propone una visión que busca integrar, de manera eficiente, los Centros de Zoonosis a la red sanitaria de cada municipio.
Según los informes actuales de los organismos internacionales de salud y sanidad animal, el %60 de los patógenos capaces de afectar al hombre y causar zoonosis, provienen de los animales domésticos y salvajes. Además, casi un 75% de las enfermedades infecciosas consideradas emergentes son zoonóticas.
Trabajar en la prevención de estas enfermedades exige pensar políticas públicas consensuadas y sustentables, donde interactúen todas las autoridades provinciales y municipales. Uno de los niveles de trabajo tiene que ver con la función de los Centros de Zoonosis en la Provincia de Buenos Aires. El papel de estos Centros en la Salud Pública debe ser clave, ya que es el primer eslabón de una cadena fundamental: la promoción de la salud humana por medio de la prevención, control o erradicación de las enfermedades zoonóticas (tanto en zonas urbanas como rurales) y de la Tenencia Responsable de los animales domésticos en cada localidad.
Es innegable que existe un deterioro de estos espacios y que la mayoría de los municipios no cumplen con las condiciones básicas necesarias para su efectivo funcionamiento: falta de presupuesto, de personal técnico capacitado, de políticas integradoras referidas a la salud pública y animal. También podemos hablar de desidia e irresponsabilidad de algunos funcionarios, hasta el punto de afirmar que algunos municipios del interior provincial que no cuentan con centros de zoonosis. Tampoco se ha logrado el trabajo conjunto con la comunidad, su integración para la participación y el desarrollo de estrategias educativas/comunitarias sobre la Tenencia Responsable, el bienestar animal, la salud y la prevención de estas enfermedades.
El Colegio de Veterinarios de la Provincia de Buenos Aires, a través de su comisión de Zoonosis, trabaja para fortalecer estos espacios fundamentales mediante una “Propuesta de estructura y gestión para los Centros de Zoonosis” que brinda un marco regulatorio y un piso operativo común para todos los municipios, facilitando la comprensión de la misión que deben cumplir en la sociedad e integrándose, de esta manera, a la red sanitaria de cada municipio.
Cuando se habla de Centro de Zoonosis se debe entender que se trata del organismo oficial de vigilancia y aplicación de normas internacionales, nacionales, provinciales y municipales relacionadas con las enfermedades zoonóticas y la Tenencia Responsable de animales domésticos. Este organismo debe estar equipado y calificado para prevenir y diagnosticar enfermedades como rabia, psitacosis, tuberculosis, toxoplasmosis, entre otras, y actuar por medio de campañas de vacunación y control para dicha prevención. Tiene, además, que disponer de la capacidad operativa para reducir el número de animales callejeros, encarando activas campañas de esterilización quirúrgica, contando con la colaboración de los veterinarios privados radicados en el partido, pero sin perder vista su razón de ser primordial.
Por esta razón, los Centros de Zoonosis deben cimentar su estructura, en primera instancia, en la lucha contra aquellas enfermedades de carácter prevalente y de alto impacto en la población de su zona de influencia. El trabajo local, en conjunto con los vecinos, se vuelve fundamental en la búsqueda de cambios significativos en la calidad de vida de la comunidad. Así también, se vuelve primordial el trabajo trans y multidisciplinario, que involucre a todas las áreas de salud y desarrollo social, haciendo fuerte hincapié en los determinantes socio-económico culturales. En este sentido, deben estar bajo la órbita de la Secretaría de Salud y disponer de instalaciones que faciliten la atención y el abordaje integral de la problemática sanitaria local.
La promoción de la Tenencia Responsable debe ser (siempre) una prioridad, brindando información útil para lograr una sana convivencia entre las personas y sus animales domésticos. Es así, que la estrategia de trabajo debe ser la Atención Primaria de la Salud, integrando los Centros de Zoonosis a los equipos de salud para trabajar en estrategias y actividades efectivas que tiendan a lograr la plena participación comunitaria en tanto aprendizajes y concientización que garantice el derecho a la salud; el establecimiento de recursos técnicos de acuerdo a las necesidades locales y el reordenamiento de los mismos, llevando la actividad al terreno social que lo padece y de ser necesario, recurriendo a la capacidad del servicio central para reforzar la equidad operativa.
A partir de una reorganización del sistema, su estructura flexible podrá ser aprovechada para abordar nuevas enfermedades emergentes o bien para planificar actividades a fin de controlar casos de enfermedades exóticas. Lo importante es que comencemos a reorganizar y a fortalecer todos nuestros recursos y sistemas en pos de la sanidad animal y su bienestar y, por ende, de la Salud Publica.
El TRABAJO DEBE ORIENTARSE HACIA LA PREVENCIÓN Y NO SOLO A CURAR. ESTA ES LA PREMISA HACIA UNA SALUD PUBLICA INTEGRAL QUE OPTIMIZA LOS RECURSOS.