Con la bula “Quandoquidem adoranda”, el papa Pío XII, creo el 11 de febrero de 1957 la Diócesis de Nueve de Julio. Actualmente si titular es Monseñor Ariel Torrado Mosconi, desde el 1° de diciembre del año pasado. Hoy se cumple 59 años desde aquelacontecimiento.
Comprende además del nuevejuliense a los partidos de Bragado, Carlos Casares, Carlos Tejedor, Florentino Ameghino, General Pinto, General Viamonte, General Villegas, Hipólito Yrigoyen, Lincoln, Pehuajó, Pellegrini, Rivadavia, Salliqueló, Trenque Lauquen, Tres Lomas y Veinticinco de Mayo. Esto es, asiste espiritualmente a cerca de 400.000 personas, en casi 57.000 km2.
Lo hace a través de 33 Parroquias, y 182 Iglesias y capillas con 50 sacerdotes; 5 Diáconos permanentes; 9 Hermanos; 10 Seminaristas mayores; 76 Religiosas; 2 Monasterios, uno de monjas y otro de sacerdotes y seminaristas; 21 Casas de religiosos, 5 de varones y 16 de hermanas consagradas; y 23 Centros educativos.
Cuando a fines de la década del 50 se escogió a Nueve de Julio como centro de la diócesis se meritaron su potencial económico en relación a otras ciudades de la jurisdicción, su población, la zona en sí, sus industrias, fábricas y la proyección de crecimiento en forma sostenida e ininterrumpida. Sin embargo, esos parámetros, han retrocedido en la última década.
El primer obispo de Nueve de Julio fue Monseñor Agustín Adolfo Herrera, designado por Pío XII el 13 de marzo de 1957. Tras recibir la consagración episcopal el 11 de mayo siguiente, tomó posesión de la sede el 2 de julio de 1957. Fue trasladado por Juan XXIII como coadjutor de Jujuy el 24 de julio de 1961.
El segundo obispo fue Monseñor Antonio Quarracino, elegido por Juan XXIII el 3 de febrero de 1962. Luego de su ordenación episcopal el 8 de abril de ese año, gobernó pastoralmente esta sede hasta el 3 de agosto de 1968, en que Pablo VI lo trasladó a la diócesis de Avellaneda.
Tercer obispo fue Mons. Alejo Benedicto Gilligan, elegido por Pablo VI el 29 de julio de 1969; recibió la ordenación episcopal y tomó posesión el 4 de octubre de 1969; renunció por haber cumplido la edad canónica el 28 de agosto de 1991.
Lo sucedió, como cuarto obispo, Monseñor José Victorio Tommasi, quien siendo auxiliar de Bahía Blanca, fue trasladado por Juan Pablo II a la diócesis de Nueve de Julio el 28 de agosto de 1991, de la que tomó posesión el 18 de octubre de ese mismo año. Murió el 16 de setiembre de 1998, en Barcelona (España).
El quinto obispo de Nueve de Julio fue Monseñor Martín de Elizalde, benedictino, a quien Juan Pablo II designó primeramente Administrador Apostólico con fecha 18 de setiembre de 1998. El mismo Pontífice lo eligió obispo de esta sede el 6 de julio de 1999, y fue consagrado el 14 de setiembre. El 17 de setiembre de 1999, tomó oficialmente posesión de la sede episcopal de Nueve de Julio. Lo fue hasta el 30 de noviembre de 2015,cuando oficialmente se le aceptó el pedido de retiro por jubilación.
El sexto diocesano es el actual, Monseñor Ariel Torrado Mosconi, quien siendo obispo auxiliar de Santiago del Estero, fue trasladado por el papa Francisco obispo coadjutor de Nueve de Julio el 12 de mayo de 2015, y tras la renuncia de Martín de Elizale, inició su ministerio pastoral por sucesión el 1º de diciembre de 2015.
Como se observa en esta geografía la tarea es acción constante de quien se encuentra al frente de la diócesis. Si bien es cierto que las comunicaciones fluidas y por distintos medios, ayuda, la relación personal estimula los vínculos, máxime, donde es costumbre que los feligreses y la comunidad e general, quiere ‘verle la cara al cura’, ya que eso le permite otra manera de contar sus necesidades o flaquezas espirituales.
A 59 años de su creación, el Obispado de Nueve de Julio esta dando muestras de cambio y crecimiento. Las transformaciones se observan en el mayor vuelco de las católicos a participar de los actos, sacramentos y ceremonias religiosas. Los avances van en sintonía con el mensaje que transmite al mundo, Francisco, desde la Santa Sede.
Agencia MTR