A partir del domingo 23 de marzo, el Gobierno de Javier Milei dejará sin efecto el Plan de Pago de Deuda Previsional, conocido popularmente como la “moratoria previsional”. Esto implica que aquellas mujeres y hombres en edad de jubilarse que no hayan alcanzado los 30 años de aportes al sistema previsional argentino ya no contarán con la herramienta que había establecido la Ley 27.705 desde marzo de 2023 para acceder a una jubilación. En rigor, muchas personas que trabajaron a lo largo de su vida en una situación informal quedarán excluidas del sistema.
Así, la crisis del sistema previsional argentino no hace más que profundizarse.
Los adultos mayores son quienes se vieron más afectados por el ajuste del gobierno ultraderechista y el abandono del Estado. Discontinuar el mecanismo de cancelación de deuda del sistema previsional tendrá un impacto severo en el presente como en los años venideros. Y es que, según remarcan los especialistas, solo 3 de cada 10 hombres y apenas 1 de cada 10 mujeres podrán jubilarse.
Esta suspensión afecta al universo de adultos mayores que ya tienen la edad para jubilarse. Si tenés 60 años (mujeres) o 65 (hombres) y querés jubilarte, ya no podés usar este mecanismo después del 23 de marzo.
De acuerdo con el último Informe de Estadísticas de la Seguridad Social que elabora el Anses, en septiembre de 2024 hubo un total de 7.836.722 beneficiarios de jubilaciones y pensiones, de todos ellos, “el 78% tiene al menos un beneficio del SIPA, mientras que el 22% restante tiene solo beneficios no contributivos, y dentro de los beneficiarios del SIPA, “un 64% tiene beneficios a los que accedió por moratoria o plan de pago de deuda previsional, mientras que el 36% restante corresponde a beneficios contributivos puros.
Asimismo, Anses aclara: La distribución por sexo muestra que la mayoría de beneficiarios (no se incluyen los titulares de beneficios no contributivos) son mujeres (64% contra un 36% de varones). Esta mayor concentración de mujeres dentro de los beneficiarios previsionales se explica por las moratorias: el 73% de las beneficiarias mujeres tienen beneficios por moratoria (contra un 46% de los varones). Además, del total de beneficiarios con moratoria, el 74% son mujeres.”
Los abogados previsionales aseguran que esta limitación no solo afecta al cobro de la prestación previsional, sino también al beneficio de la cobertura médica. “Los condenan no solamente a no tener un ingreso, por más mínimo que sea, sino también a la falta del sistema de salud y a los medicamentos.
Otro tema no menor es que un artículo de esta ley permite completar aportes a las personas que aún no llegaron a la edad jubilatoria, pero que saben que cuando lleguen a la edad les va a faltar aportes, entonces pueden empezar a realizarlos con este mecanismo. Esa parte de la ley no se vencería, por lo que los adultos mayores que no llegan a la edad para jubilarse podrían seguir completando aportes después de marzo. Sin embargo, habrá que esperar hasta conocer si se respetará la vigencia de ese capítulo.
Pasado el 23 de marzo, si no hay un decreto que prorrogue el plan de pagos, los adultos mayores tendrán como única alternativa esperar a cumplir los 65 años para acceder a una Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM) —que representa solo el 80 por ciento de la jubilación mínima—, pero solamente podrán beneficiarse si logran cumplir con ciertos requisitos socioeconómicos.
En rigor, eliminar el Plan de Pago de Deuda Previsional provocaría un aumento “disimulado” de la edad jubilatoria de las mujeres para acceder a una pensión, ya que sin la herramienta, muchas se verán obligadas a esperar hasta los 65 años para acceder a la PUAM.