En un acto celebrado en la Casa Presidencial de Honduras, la presidenta de la Nación, Xiomara Castro, condecoró a un grupo destacado de artistas, líderes políticos y organizaciones, tanto nacionales como internacionales, en el marco de la celebración del tercer aniversario del Gobierno del Socialismo Democrático.
La ceremonia, marcada por la solidaridad con el pueblo hondureño, reconoció a aquellos que han acompañado la lucha por la refundación de la patria, un proceso clave para el actual régimen.
A los reconocimiento estuvo la distinción otorgada al Dr. Alejandro Rusconi, referente del Movimiento Evita, organización solidaria con las causas sociales de Honduras. El médico Rusconi, oriundo de Nueve de Julio y residente en La Plata, recibió el reconocimiento en nombre del Movimiento Evita por su incansable trabajo en la solidaridad internacional y por su compromiso con la resistencia y la lucha del pueblo hondureño.
La condecoración fue entregada por la propia presidenta Castro, quien expresó su gratitud por el apoyo incondicional de Rusconi y el Movimiento Evita en la lucha por la justicia social en Honduras.
“La solidaridad no tiene fronteras”, dijo la presidenta Castro durante su intervención. “Este tipo de alianzas internacionales son las que fortalecen nuestras luchas y nos dan esperanza en la transformación que necesitamos para nuestra patria. Hoy, reconocemos a quienes, con su trabajo, nos acompañan en este proceso histórico de refundación.”
El evento fue también una ocasión para resaltar el papel fundamental de los artistas en la cultura y política del país, quienes, a través de su obra y participación social, han contribuido a visibilizar los problemas y las aspiraciones del pueblo hondureño.
En la ceremonia estuvieron presentes importantes figuras del ámbito político y cultural, así como invitados internacionales que han sido aliados estratégicos de la actual administración. Entre ellos se encontraba el embajador de Argentina en Honduras, quien destacó la estrecha relación entre ambos países y la colaboración continua entre el gobierno de Castro y los movimientos sociales de la región.
El acto concluyó con un llamado a seguir trabajando por un futuro más justo y equitativo para todos los hondureños, con la esperanza de que la lucha por la Refundación de la Patria siga siendo un eje central de la política del gobierno del Socialismo Democrático.
Este evento refleja no solo el reconocimiento a la labor de aquellos que apoyan el proceso de cambio en Honduras, sino también el fortalecimiento de las relaciones internacionales basadas en la solidaridad y el compromiso con los derechos humanos y la justicia social.