El sector energético vuelve a enfrentar una crisis preocupante, especialmente para las distribuidoras y cooperativas eléctricas de la provincia de Buenos Aires. En particular, las 200 cooperativas que operan en la región están atravesando una situación crítica, arrastrando deudas millonarias con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa). La deuda acumulada se ha convertido en una amenaza existencial para estas instituciones, muchas de las cuales advierten que están al borde de la desaparición si no se implementan medidas urgentes.
Este fue el tema central de un encuentro de la Federación de Cooperativas de Prestadores Eléctricos de la Provincia de Buenos Aires (APEBA) realizado este jueves en Olavarria.
Desde hace un tiempo, estas cooperativas vienen solicitando un plan de pago accesible para poder regularizar su situación, dado que las deudas se han vuelto impagables debido a los aumentos en las tarifas de energía y la falta de recursos. La presión sobre el Gobierno Nacional se intensifica mientras se espera que se oficialice un decreto que permita a estas entidades ingresar en un plan de pagos con Cammesa. Sin embargo, lo que podría ser un respiro, también genera temor, ya que los altos intereses y las cuotas establecidas pondrían en peligro la estabilidad financiera de las cooperativas.
La Federación de Cooperativas de Prestadores Eléctricos de la Provincia de Buenos Aires (APEBA) discutió en el Club Pueblo Nuevo de Olavarría, encabezada por su presidente Oreste Binetti la situación y resaltar la urgencia de una solución más flexible y accesible. Durante el encuentro, los dirigentes expresaron que, aunque están a la espera de una resolución del Gobierno de Javier Milei, el plan de pagos propuesto podría resultar en un sobreendeudamiento aún mayor para muchas cooperativas.
Deuda Millonaria y Desafíos para el Sector
Oreste Binetti, titular de APEBA, detalló la magnitud de la crisis en una conferencia de prensa. Según Binetti, las cooperativas nunca habían experimentado una situación tan grave. Antes de la pandemia, aunque había algunos problemas puntuales de pago, nunca se había llegado a una crisis como la actual. “Hoy, algunas cooperativas pueden estar pagando el 100% de la factura, pero enfrentar deudas que no sabemos cómo podremos saldar”, indicó Binetti. El pago de las facturas de electricidad se ha vuelto cada vez más insostenible, y las tasas de interés que se aplican en el nuevo plan de pagos podrían ser insoportables para las entidades.
A finales de 2024, Cammesa aprobó un plan de pagos que permitiría a las distribuidoras y cooperativas de todo el país regularizar una deuda total de 1.000 millones de dólares por el suministro de energía no abonado en los últimos meses. El plan establece un período de gracia de un año y luego un plazo de 6 años (72 meses) para liquidar las deudas con una tasa de interés diferencial. Sin embargo, muchas cooperativas, como la de Luján, advierten que, además de la base de deuda, tendrán que afrontar una carga adicional de intereses de unos 400 millones de pesos. “Hoy no estamos en condiciones para poder hacerlo. Corremos peligro de desaparecer”, aseguró Binetti.
Impacto en las Finanzas de las Cooperativas
El total de la deuda de las 79 distribuidoras y cooperativas con Cammesa alcanza los 2,35 billones de pesos. De esta cifra, alrededor de 1,14 billones ya habían sido normalizados antes de 2023, y otros 111.684 millones durante 2024. Esto deja una deuda pendiente de 1,1 billón de pesos (aproximadamente 1.000 millones de dólares), que está mayormente relacionada con el efecto de la devaluación del peso en diciembre de 2023 y la demora del Gobierno nacional y las provincias en otorgar aumentos de tarifas a las distribuidoras.
En paralelo, el sector cooperativo continúa exigiendo que el Gobierno provincial de Axel Kicillof autorice un aumento mayor en las tarifas de energía, para destinar esos recursos al pago de la deuda con Cammesa. Sin embargo, la postura del gobierno provincial ha sido clara: considera que este es un conflicto privado entre las cooperativas y su proveedor, Cammesa, y se ha mostrado reticente a intervenir. Tampoco la posible intervención judicial de cinco cooperativas bonaerenses, impulsada por el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), ha logrado cambiar la postura de la administración.
El Futuro de las Cooperativas Eléctricas en Riesgo
La situación es más que crítica para las cooperativas eléctricas, que no solo enfrentan deudas millonarias, sino también un panorama incierto en cuanto a la sostenibilidad del servicio y su capacidad para seguir operando. Las cooperativas advierten que, sin un plan de pagos más accesible y con menores intereses, muchas de ellas no podrán resistir el peso de las deudas y se verán obligadas a cerrar.
El Gobierno nacional se encuentra ante un dilema complejo: encontrar una solución que permita salvar a las cooperativas sin comprometer aún más las finanzas públicas. Mientras tanto, las cooperativas del interior bonaerense siguen esperando una respuesta que pueda determinar su futuro y el de miles de usuarios que dependen de estos servicios esenciales.
Agencia MTR