En una entrevista en ‘Despertate’ por AN y Máxima 89.9, Federico Bellini, presidente del Centro Universitario Nuevejuliense -CUN-, compartió su perspectiva sobre la relevancia histórica y social del trabajo que realiza la institución. En particular, destacó la fiesta de fin de curso, conocida como el “Baile de Egresados”, un evento emblemático que se ha celebrado ininterrumpidamente desde hace más de 51 años.
“Este evento ha sido un hito para los egresados de la ciudad de 9 de Julio”, comentó Bellini, subrayando que desde 1973 la fiesta fue reconocida oficialmente como un evento de bien público y de interés municipal. “Es un trabajo histórico que hemos mantenido a lo largo de los años, y es un orgullo poder ofrecerles a los chicos un cierre tan importante antes de dar el paso hacia la universidad o el ámbito laboral”, añadió.
El baile, que representa la culminación de un largo año de trabajo, no solo es una tradición, sino también un componente fundamental de la vida estudiantil en la ciudad. “Este evento marca el último encuentro de los egresados antes de comenzar una nueva etapa de vida, por eso tiene tanto significado para la comunidad”, señaló Bellini.
Además del Baile de Egresados, el CUN lleva adelante un compromiso social que va más allá de la organización de este encuentro que será recordado siempre. La institución ofrece becas a estudiantes que desean cursar estudios universitarios, especialmente en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), brindándoles alojamiento en dos residencias propias. “Contamos con dos casas en la ciudad de La Plata, que albergan a casi 40 estudiantes de Nueve de Julio, para que puedan continuar su educación sin la preocupación de la vivienda”, explicó Bellini, destacando la importancia que ello reviste.
Sin embargo, Bellini también aprovechó la oportunidad para abordar una situación reciente que involucra a la organización del Baile de Egresados. Un grupo de padres y estudiantes de la Escuela de Comercio ha lazado CUN-Comercio, intentando replicar este evento, lo que generó cierto malestar entre los miembros del CUN. “El evento organizado por los padres de la Escuela de Comercio no solo es una réplica de nuestra fiesta, sino que se ha promovido bajo un enfoque económico, lo cual es una violación de las normas que han guiado nuestra tradición durante más de cinco décadas”, explicó y se usa la marca CUN que es de una institución acreditada y reconocida y no responde a una persona o colegio o grupo. Es una institución oficial.
En ese sentido, Federico Bellini, expresó que, tras meses de organización del tradicional baile de egresados del CUN, se enteraron sorpresivamente el 8 de diciembre de la existencia de otro evento paralelo, organizado por padres y estudiantes de la Escuela de Comercio.
El CUN había comenzado a trabajar en la organización de este encuentro que será el 27 de diciembre, en abril pasado con un presupuesto de 10 millones de pesos para cubrir los costos operativos de la fiesta, que normalmente reúne entre 250 y 300 egresados. Según Bellini, la organización de este evento se realiza bajo normas estrictas de seguridad y cumplimiento, sin apoyo externo de entidades públicas o privadas. Sin embargo, la realización de un segundo baile, sin ninguna consulta ni coordinación con las autoridades del CUN, afectó directamente a las familias que ya se habían comprometido a pagar la entrada más cara, ya que el costo operativo se distribuye entre las familias inscritas.
Bellini subrayó que la situación refleja una crisis institucional en Nueve de Julio, donde la división de esfuerzos, debilita el trabajo de instituciones que tienen un objetivo claro y fundamental, como es el caso de su institución, que ha facilitado el acceso a la educación universitaria durante más de 50 años.
En su intervención, Bellini también mencionó que, a pesar de la falta de comunicación y los desacuerdos, el CUN está dispuesto a incluir a los egresados de la Escuela de Comercio en su Fiesta, siempre que se respete el acuerdo original de no generar costos adicionales para las familias involucradas. En este sentido, propuso que los padres y delegados de la Escuela de Comercio contribuyan con los fondos sobrantes de su promoción para equilibrar los costos y permitir que todos los egresados participen sin incurrir en nuevos gastos.