La Oficina Municipal de Información al Consumidor -OMIC- de Nueve de Julio ofrece valiosas recomendaciones para que los consumidores eviten caer en el sobreendeudamiento como consecuencia de un mal uso de las tarjetas de crédito.
En tiempos donde el acceso al crédito es cada vez más común, es fundamental aprender a manejarlo con responsabilidad para evitar problemas financieros a largo plazo.
A continuación, se presentan las claves para usar la tarjeta de crédito de manera estratégica y saludable para las finanzas personales.
1. Reducir o eliminar el uso excesivo de la tarjeta de crédito
Uno de los errores más comunes entre los usuarios de tarjetas de crédito es su uso excesivo para cubrir gastos cotidianos, como compras de alimentos, ropa o entretenimiento. Esto puede llevar rápidamente a una acumulación de deudas.
La recomendación es utilizar la tarjeta de crédito solo en situaciones en las que sea realmente necesario y evitar depender de ella como fuente de financiamiento recurrente. Si bien las tarjetas de crédito ofrecen comodidad, el uso desmedido puede desencadenar una espiral de endeudamiento. En su lugar, es aconsejable ajustar el presupuesto personal y usar la tarjeta solo para compras planificadas o esenciales que se puedan pagar sin generar problemas financieros.
2. Usar la tarjeta para compras grandes y de necesidad
En lugar de utilizar la tarjeta de crédito para todo tipo de compras, es más prudente reservar su uso para adquisiciones importantes, como electrodomésticos, muebles o gastos de salud, que no se puedan cubrir con dinero en efectivo o mediante otras alternativas. Además, si se eligen compras grandes, es preferible financiarlas en cuotas fijas, de entre 6 a 12 meses, para distribuir el costo de la compra y acumular deuda con intereses, que suelen ser elevados.
3. Ver la tarjeta de crédito como una deuda futura
Muchas personas cometen el error de ver el crédito como si fuera una extensión de su salario. Esto se debe a la facilidad de realizar compras y pagos con la tarjeta sin tener que usar efectivo de inmediato. Sin embargo, la realidad es que cada compra realizada con la tarjeta es un préstamo que deberemos devolver, generalmente con intereses, y por lo tanto, se debe manejar con cautela.
4. Evitar pagar solo el mínimo de la tarjeta de crédito
Uno de los errores más peligrosos al utilizar una tarjeta de crédito es pagar únicamente el mínimo establecido por el banco o la entidad emisora. Si bien esta opción puede parecer conveniente para no afectar el flujo de caja en el corto plazo, un largo plazo puede generar una acumulación de intereses y comisiones que aumentarán significativamente.
Cuando solo se paga el mínimo, el saldo restante de la deuda se traslada al mes siguiente, y se le aplican intereses adicionales, lo que puede generar un efecto “bola de nieve”. A medida que pasan los meses, la deuda original crece debido a los intereses compuestos, dificultando el pago de la misma. Lo recomendable es pagar siempre más que el mínimo y, si es posible, abonar el saldo completo para evitar futuros desordenes financieros ante acumulación de gastos y altos intereses.
5. Verificar el Costo Financiero Total (CFT) y las tasas de interés aplicables
Antes de realizar cualquier compra con la tarjeta de crédito, es fundamental conocer el Costo Financiero Total (CFT) y las tasas de interés aplicables. El CFT no solo incluye los intereses, sino también otros cargos adicionales que pueden aplicarse por el financiamiento de compras en cuotas, como seguros, comisiones o gastos administrativos. Estos costos pueden variar dependiendo de la entidad emisora y del tipo de tarjeta, por lo que es importante comparar diferentes opciones y elegir la más conveniente.
Al verificar el CFT, los consumidores pueden tener una visión más clara de cuánto realmente costará financiar una compra a través de la tarjeta de crédito. Esta información ayuda a tomar decisiones más informadas y evitar sorpresas desagradables cuando llegue el momento de pagar.
6. Establecer un presupuesto y seguirlo rigurosamente
Un aspecto clave para evitar el sobreendeudamiento es la planificación financiera. Es esencial establecer un presupuesto mensual en el que se incluya el pago de las deudas de la tarjeta de crédito. Este presupuesto debe ser realista, teniendo en cuenta tanto los ingresos como los gastos fijos y variables, para garantizar que siempre haya suficiente dinero para cubrir los pagos a tiempo.
7. Estar atento a los cambios en las condiciones de la tarjeta
Las entidades financieras suelen modificar las condiciones de las tarjetas de crédito, como las tasas de interés, comisiones o incluso las promociones de cuotas sin interés. Por ello, es importante estar atento a los estados de cuenta y comunicarse con el banco en caso de dudas sobre las condiciones de uso.
El uso responsable de la tarjeta de crédito es fundamental para mantener una salud financiera estable y evitar caer en el sobreendeudamiento. La OMIC de 9 de Julio recomienda seguir estos consejos para utilizar el crédito de manera estratégica y asegurar que las finanzas personales no se vean afectadas por malas decisiones. En última instancia, se trata de aprender a gestionar las deudas.
La OMIC de Nueve de Julio está disponible para asesorar a los consumidores en cualquier consulta relacionada con el uso de las tarjetas de crédito y otros productos financieros. Los vecinos pueden acercarse a la oficina ubicada en Libertad Nº 934, 9 de Julio, o comunicarse a través del teléfono 2317 610000 (Int. 160). También pueden escribir a la dirección de correo electrónico:omic @9dejulio .gov .ar