La fecha conmemora la gesta heroica de los soldados de la Confederación Argentina, liderada por Juan Manuel de Rosas, quienes en inferioridad de condiciones resistieron la invasión del ejército anglo-francés que pretendía colonizar los territorios de nuestro país.
El acontecimiento sirvió para ratificar y garantizar la soberanía nacional y es símbolo de independencia, libertad y unidad nacional.
Estas potencias buscaban imponer la libre navegación de los ríos argentinos, amenazando la autonomía del país para favorecer sus intereses comerciales y estratégicos.
El enfrentamiento tuvo lugar en un tramo estratégico del río Paraná conocido como la Vuelta de Obligado, donde las tropas argentinas, bajo el mando del general Lucio Norberto Mansilla, desplegaron cadenas sobre el río y fortificaciones en sus márgenes.
Aunque la flota extranjera logró superar las defensas gracias a su superioridad tecnológica y numérica, las pérdidas sufridas por las fuerzas invasoras marcaron un punto de inflexión, debilitando su posición política en las negociaciones posteriores.
El 20 de noviembre no solo evoca la memoria de quienes lucharon en la Vuelta de Obligado, sino que también refuerza el valor de la unidad nacional frente a desafíos externos. La soberanía no solo implica defender el territorio, sino también mantener la independencia política, económica y cultural del país.