Cada 11 de octubre, Argentina celebra el Día del Martillero y Corredor Público, conmemorando la primera Asamblea Constitutiva de esta profesión, que tuvo lugar en 1943 en Tandil. Ese encuentro fue fundamental para agrupar a los profesionales del sector y promover su reconocimiento. En 1986, se amplió la celebración para incluir a los corredores inmobiliarios.
Diferencias entre Martillero Público y Corredor Inmobiliario
Aunque ambos desempeñan roles en el mercado inmobiliario, es importante distinguir entre sus funciones:
- Martillero Público: También conocidos como rematadores, son profesionales habilitados para realizar subastas públicas de bienes muebles e inmuebles. Su tarea se centra en garantizar la transparencia en las operaciones, asesorando a las partes sobre las características y condiciones de los bienes subastados. Los martilleros pueden realizar remates privados, oficiales o judiciales.
- Corredor Inmobiliario: Actúan como intermediarios entre la oferta y la demanda en el sector inmobiliario. Su labor consiste en verificar los títulos, los registros de propiedad y otros documentos necesarios para llevar a cabo transacciones, asegurando que todo esté en orden para el cambio de titularidad de una propiedad.
Requisitos para ser Martillero Público en Argentina
Para ejercer como Martillero Público en Argentina, se deben cumplir ciertos requisitos establecidos por la Ley N° 25.028, que regula la profesión:
- Ser mayor de edad y no estar inhabilitado para ejercer.
- Poseer un título universitario correspondiente, ya sea expedido o revalidado en el país.
- Inscripción en el Colegio de Martilleros de la jurisdicción donde se va a ejercer, cumpliendo con los siguientes criterios:
- Acreditar buena conducta.
- Tener domicilio en la jurisdicción.
- Constituir una garantía real o personal, según lo determine el organismo de control.
Estos requisitos son fundamentales para garantizar la idoneidad y profesionalismo de quienes deseen desempeñarse en esta importante área del mercado inmobiliario.
El 11 de octubre no solo es una fecha para recordar la historia de los martilleros y corredores públicos, sino también para reflexionar sobre la importancia de su trabajo en la regulación del mercado inmobiliario y la protección de los derechos de los involucrados en transacciones de bienes.