La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) llevó a cabo recientemente clínicas de conducción segura de motos en Bahía Blanca, con el objetivo de mejorar la seguridad vial en la ciudad. La actividad se desarrolló en dos etapas: primero, se capacitó a instructores locales para que puedan replicar esta formación en el futuro, y luego se brindó la oportunidad a motociclistas particulares de recibir formación directa.
Este programa se enmarca en la iniciativa de la ANSV de promover la formación continua de motociclistas en todo el país. Las jornadas incluyeron temas cruciales como el equipamiento de seguridad, la correcta postura en la conducción, técnicas de frenado, así como la identificación de puntos ciegos y la percepción del riesgo. Estas enseñanzas son esenciales para fomentar una conducción responsable y segura entre los usuarios de motocicletas.
Además, la ANSV entregó 300 cascos a la ciudad, como parte de una estrategia para incentivar su uso. Este equipamiento es fundamental para la protección de los motociclistas, ya que el uso adecuado del casco puede reducir hasta en un 70% las probabilidades de sufrir lesiones graves en caso de accidentes viales.
En las clínicas participaron autoridades de la ANSV, representantes del municipio, familiares de víctimas de siniestros viales y miembros de la Coalición Argentina de la Movilidad Segura. La presencia de estas figuras refleja el compromiso colectivo por mejorar la seguridad en las vías y promover una cultura vial más consciente y responsable.
Estas acciones no solo tienen un impacto directo en la seguridad de los motociclistas, sino que también involucran a toda la comunidad, destacando la importancia de la educación y la formación en la reducción de accidentes de tráfico. La ANSV continuará trabajando para llevar este tipo de capacitaciones a más localidades, con la esperanza de crear un entorno más seguro para todos los usuarios de la vía.