Cada 24 de agosto, Argentina conmemora el Día del Lector y la Lectora en honor a Jorge Luis Borges, uno de los escritores más destacados del siglo XX.
Esta fecha no solo celebra el nacimiento del autor, nacido en 1899, sino que también busca promover la lectura y resaltar la importancia de la literatura en la vida cultural del país.
Jorge Luis Borges es reconocido por su influencia profunda en la literatura mundial, con una obra que incluye cuentos, ensayos y poesías. Sus escritos exploran conceptos como el infinito, los laberintos y la identidad, y han dejado una marca indeleble en la literatura universal.
En 2012, el Congreso Nacional argentino instituyó el Día del Lector y la Lectora para rendir homenaje a su legado y fomentar el amor por la lectura.
La celebración de este día se caracteriza por una serie de actividades culturales y educativas en todo el país. Entre los eventos más destacados se encuentra la “suelta de poemas”, una iniciativa que busca compartir la poesía en espacios públicos, bibliotecas, colegios y plazas. Esta práctica simboliza el deseo de llevar la literatura a la mayor cantidad de personas posible y de celebrar el impacto que las palabras pueden tener en la vida cotidiana.
El Día del Lector y la Lectora también sirve como una oportunidad para reflexionar sobre el papel fundamental de los libros en el desarrollo cultural y personal. En un mundo cada vez más digitalizado, este día enfatiza la importancia de la lectura como una herramienta esencial para la comprensión del mundo y para el crecimiento individual.
Además de las actividades relacionadas con Borges, el día está marcado por una serie de eventos diseñados para acercar la literatura a los ciudadanos. Lecturas públicas, talleres y encuentros literarios buscan reforzar el vínculo entre los lectores y la literatura, reafirmando el papel de los libros como pilares de una sociedad crítica y consciente.
En resumen, el Día del Lector y la Lectora en Argentina es una celebración multifacética que honra la memoria de Jorge Luis Borges y el poder transformador de la lectura. Es una ocasión para redescubrir el placer de leer, explorar nuevas obras y fortalecer los lazos culturales a través de la literatura.