Crecen los delitos en zonas rurales de la región

Los campos de esta zona bonaerense no tienen tranquilidad y a su vez el miedo gana el ánimo de los productores rurales. Este clamor lo ha manifestado en varias oportunidades en estos últimos meses la Sociedad Rural.
En 9 de Julio, ante la repercusión en la comunidad que tuvo la denuncia  del lunes pasado -que hiciera esta institución sobre el robo de ganado y la no toma de declaración  en uno de los casos por la Patrulla Rural,  y ha eso hay que sumarle las expresiones que el Vicepresidente de la institución  Nicolás Capriroli hizo en Cadena Nueve, el Jefe Policial se reunió con este productor junto a otro integrante de la Sociedad Rural, Luis Vanina para tratar la problemática.
En el encuentro, solo se  habló de la preocupación de las autoridades comunales y se describieron varios hechos. (Lo expresado en esa reunión, luego, fue transmitido por el renunciante Jefe Policial al Secretario de Gobierno Walter Fons y éste, a su vez,  hoy a primera hora de la mañana, se las contó a Walter Battistella).  Se desconoce el camino a seguir por el Jefe Comunal.
A este cuadro, se suma que en las últimas horas unos 25 productores, preocupados por la ola de inseguridad, se reunieron con las autoridades policiales de Alberti.
Lo concreto es que desde hace varios meses, una banda de delincuentes, que llama la atención por su profesionalismo y organización, sorprende a los productores dentro de sus campos, los mantiene cautivos durante largas horas y escapa con dinero y objetos de valor. Por el modus operandi, una de las líneas investigativas pone bajo sospecha a ex agentes policiales.
Es más, un alto funcionario platense resumió a Cadena Nueve la preocupación con una frase “policías investigan a policías. Solo Dios sabe que resultará.”
Las víctimas de estos delincuentes coinciden a la hora de describirlos diciendo que  no ejercen violencia física, trabajan encapuchados y con guantes, tienen información calificada sobre los bienes de sus víctimas y se toman todo el tiempo que sea necesario para conseguir lo que buscan: dinero, joyas y costosos electrodomésticos y relojes, además de otros valores. Tienen acceso a información precisa.
A ello debe sumarse que están conectados con equipos de comunicación de última generación  capaces de avisarse si la policía se acerca.
Entre los casos que más han impactado en el Partido de 9 de Julio, además de los recientes robos de 63  animales – 60 de ellos terneros  – ponen al descubierto la tranquilidad con la que operan, y lo alarmante fue que en uno de los casos hubo resistencia policial para tomar la denuncia donde la victima debió desplazarse por varias sedes de la repartición – Dudignac – Patrulla Rural  – 12 de Octubre – para que se le manifestase que por cuestiones operativas o de falta de medios, la denuncia no se la podían radicar.
En la zona de 25 de Mayo, según contara “La Nación”,  los hermanos Juan Pablo y Manuel Rossi, de 22 y 19 años, respectivamente, habían terminado de cosechar en la estancia familiar La Rosa. Eran las 19.30 del 29 de junio y el crudo frío se hacía sentir. Los jóvenes se subieron cada uno a un tractor para transitar los 3000 metros que los separaban de su casa. La jornada parecía terminar con normalidad.
De repente, cuatro sujetos armados y encapuchados sorprendieron a los hermanos y los obligaron a llevarlos con los tractores hasta la residencia. En el camino, un vecino que había ingresado en la estancia también fue víctima de los delincuentes.
“Nos pedían que no los miráramos. Nos encerraron en el baño.  Su padre, Antonio, había salido, pero llegaría poco después, cuando los ladrones seguían en la estancia.
Desde aquella noche, la familia Rossi ya no duerme en su casa. Sólo va al campo a trabajar. Se siente más segura en su propiedad de fin de semana, en el centro de Chivilcoy. En 2010 ya habían sido robados.
En 9 de Julio, Bragado, Alberti, Chivilcoy y 25 de Mayo, los delincuentes ingresan en los predios a pie y cuando comienza a anochecer. Lo hacen armados. Muestran ser idóneos en su uso. No ejercen violencia física,  se cubren sus rostros y manos,  y utilizan intercomunicadores o handys para organizar la salida de los predios, finalizada “la tarea”.
Hace un mes y medio, en Cañuelas un grupo  de productores rurales de  esa ciudad de Lobos,   Las Heras y Marcos Paz  hicieron llegar un escrito a funcionarios provinciales y municipales, señalando que se  declaraban en “un estado de alerta permanente” debido a la “grave situación de inseguridad” que atraviesan los ruralistas.
“Los delincuentes nos roban los caballos, rompen los alambrados de los terrenos y entran en las estancias armados”, son algunos de los relatos que se escuchan.
Por su parte, “La Nación” describe parte de una realizada que abarca otros jurisdicciones, circunscribiéndola solo a estos hechos:
“2 de mayo de 2012 
Asalto en Finca Fértil 
Cinco encapuchados irrumpieron en el campo de la familia Riolfo, en Chivilcoy, amenazaron al sereno y se hicieron de objetos de valor.
15 de mayo de 2012 
Estancia La Maruja 
Una banda armada robó una camioneta Ford F-100, un tractor y unos $ 30.000 después de mantener cautivo y golpear durante tres horas a la familia Cepeda y los peones.
16 de junio de 2012 
Robo a un concejal 
10 toneladas de soja de un silo bolsa fueron sustraidas del campo del edil de Chivicoy Enrique Solari, situado en el partido de Alberti.
23 de junio de 2012 
Ataque en una cabaña Cuatro encapuchados armados robaron dinero, dos computadoras y varios kilos de carne vacuna en El Chusco y las boleadoras, en el partido de Alberti.
29 de junio de 2012 
Horror en una estancia Cuatro ladrones sometieron durante tres horas a la familia Rossi en la estancia La Rosa, situada en el partido de 25 de Mayo, y se llevaron objetos de valor y dinero.
4 de julio de 2012 
Robaron 50.000 dólares 
Tres ladrones ingresaron en el acopio de la firma Emidelia Solari Hnos., situado en el partido de Alberti, y se llevaron dinero y objetos de valor”.