Se conoce como Grito de Alcorta al reclamo de pequeños y medianos arrendatarios rurales, que hicieron el 25 de junio de 1912, durante la presidencia de Roque Sáenz Peña, para mejorar sus acuerdos para trabajar las tierras y producir trigo.
Ocurrió en la población del mismo nombre del sur de la provincia de Santa Fe y se extendió por toda la región pampeana.
Fue el 25 de junio de 1912 al realizarse una asamblea en la Sociedad Italiana de Socorro Mutuo e Instrucción en esa ciudad de Alcorta, de la que participaron alrededor de 2000 chacareros.
La convocatoria había surgido de los campesinos de Alcorta, encabezados por Francisco Bulzani, quienes contaban con el aval de los párrocos de esa localidad y de la localidad vecina de Máximo Paz, los hermanos José, cura párroco de Alcorta y Pascual Netri, cura párroco de Máximo Paz y de los comerciantes de la zona. El abogado Francisco Netri, hermano menor de los párrocos y uno de los protagonistas, tuvo un papel destacado en la asamblea y fue quien enfatizó que los chacareros debían «constituir su organización gremial autónoma».
El suceso marcó la irrupción de los trabajadores de los campos, en su mayoría, inmigrantes europeos, especialmente italianos y españoles, dando origen además a la Federación Agraria Argentina.
El contexto histórico fue con el desarrollo del ferrocarril a través de la Generación del ’80, se empezó a sembrar trigo, el excedente del cual era exportado a Europa. Para poblar el territorio argentino se implementó una política activa de inmigración, trayendo muchos inmigrantes que huían de la pobreza europea para poblar las Pampas.
La cultura trabajadora del inmigrante europeo hizo que la tierra produjera mucho más, convirtiendo a la Argentina en el «granero del mundo». Las grandes extensiones de campos estaban en manos de pcos propietarios que ponían las condicones laborles y ello desató el reclamos de quines laboreaban las mismas.
Desde entonces, se hizo un reordenamiento en las condiciones del trabajo de la tierra.