Según el informe oficial del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la inflación en Argentina durante el mes de enero de 2025 fue del 2,2%, una cifra que marca una significativa baja en comparación con meses anteriores.
Esta variación es la más baja desde julio de 2020, cuando se registró un 1,9% en pleno contexto de pandemia. De acuerdo con los datos, también representa la menor variación mensual para un mes de febrero.
Además, enero de 2025 fue el mes con menor aumento desde 2018, lo que genera una sensación de alivio en la población y abre el panorama a un posible comienzo de desaceleración de la inflación.
En términos interanuales, la inflación acumulada durante los últimos 12 meses alcanzó un 84,5%. Aunque la cifra refleja el impacto de los aumentos en el costo de vida a lo largo del año pasado, el dato de enero muestra un leve desaceleración en la presión inflacionaria, lo que ha generado optimismo en el ámbito económico. A pesar de que la inflación interanual sigue siendo alta, este leve respiro podría ser indicativo de un cambio de tendencia en los próximos años.
El sector que más aumentos registró en enero fue el de Restaurantes y Hoteles , con un 5,3%.
Le siguió la división Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (4,0%), por incrementos en alquiler de la vivienda y gastos conexos; y Electricidad, gas y otros combustibles.
En tanto, los ítems que tuvieron las menores variaciones en enero de 2025 fueron Educación (0,5%) y Prendas de vestir y calzado (-0,7%).
Comparando con meses anteriores, la inflación de enero se muestra favorable en relación a diciembre de 2024, cuando el índice fue del 2,7%. El registro más bajo durante el gobierno de Javier Milei había sido de 2,4% en noviembre de 2024, por lo que la cifra de 2,2% de enero fue mejor de lo que muchos economistas habían pronosticado, lo que genera expectativas positivas sobre la evolución de la inflación en el futuro cercano.
El Ministerio de Economía también destacó que una de las principales razones de la desaceleración en la inflación fue el aumento de los salarios en diciembre de 2024. En ese mes, el salario promedio del sector privado registrado creció un 18%, mientras que los haberes jubilatorios subieron un 12,8%. Asimismo, la Asignación Universal por Hijo (AUH) experimentó un aumento del 107%, lo que contribuyó a mejorar el poder adquisitivo de los sectores más vulnerables de la sociedad. Este tipo de ajustes salariales y la política económica del gobierno han sido claves para contrarrestar los efectos de la inflación en los hogares argentinos.
A pesar de los datos positivos de enero, las perspectivas para los próximos meses son inciertas. Los analistas prevén que la inflación podría continuar en un proceso de desaceleración, pero que la situación dependerá de diversos factores, como la evolución de los precios internacionales de los alimentos, los costos de la energía y la cotización del dólar. Además, el impacto de las políticas monetarias y fiscales del gobierno jugará un papel importante en la estabilidad de los precios.
El gobierno argentino también estará atento a los ajustes en los precios de los servicios públicos, como el gas y la electricidad, que podrían afectar de manera directa el costo de vida de los argentinos en los próximos meses. Si bien se espera que la inflación siga siendo alta en el corto plazo, los economistas proyectan que podrían haber una moderación durante el segundo semestre de 2025, en caso de que las implementadas por el gobierno continúen mostrando resultados positivos.
En resumen, la inflación de enero de 2025 ha sido una sorpresa positiva para muchos, dado que ha registrado una disminución significativa en comparación con meses anteriores. Si bien la situación sigue siendo compleja, con una inflación interanual de más del 84%, el panorama para los próximos meses genera cierto optimismo. La combinación de aumentos salariales, la estabilización del tipo de cambio y las políticas económicas que se implementen en los próximos meses podrían ser clave para una consolidación de la desaceleración inflacionaria en Argentina. No obstante, será fundamental monitorear cerca de cómo se desarrollan estos factores y cómo afecta el comportamiento de los precios del día a día.