El 1 de febrero se celebra el Día Mundial del Galgo, una jornada impulsada por asociaciones defensoras de los derechos de los animales, con el objetivo de concienciar sobre la cruel realidad que viven estos perros, en muchos lugares de Argentina y España. A través de este día, se busca sensibilizar al público en general acerca de los abusos y maltratos a los que son sometidos los galgos, y se fomenta su rescate y adopción, dándoles una segunda oportunidad como animales de compañía.
La problemática de los galgos en Argentina y España
En el país, cada año se crían miles de galgos para ser utilizados en la caza, especialmente durante la temporada de caza que va de mayo a septiembre y de octubre a enero, conforme al país. Durante estos meses, los galgos son enclaustrados y apenas reciben cuidados. Solo salen para participar en las monterías, y son entrenados mediante técnicas extremas y crueles, como ser arrastrados a gran velocidad atados a vehículos como coches, camiones o motos.
Una vez que los galgos ya no son considerados útiles para la caza, muchos son abandonados o sacrificados de maneras atroces. El abandono masivo al final de la temporada de caza, junto con la cría incontrolada, genera una gran población de galgos desnutridos, enfermos y desamparados. Según diversas protectoras de animales, se estima que cada año cerca de 100.000 galgos son abandonados, maltratados o asesinados sin ninguna consideración por su vida.
El trabajo de las asociaciones de rescate y adopción.
A pesar de este sombrío panorama, existen numerosas asociaciones en ambos países – Argentina y España – que se dedican al rescate de estos animales. Estas organizaciones trabajan arduamente para salvar la vida de los galgos y darles la oportunidad de ser adoptados por familias dispuestas a ofrecerles un hogar lleno de amor y cuidados. A través de estas adopciones, los galgos demuestran ser perros leales, dulces y elegantes, convirtiéndose en excelentes compañeros para quienes deciden abrirles las puertas de su hogar.