El Gobierno de la Nación anunció una reducción temporal de las retenciones a los principales cultivos del país, como la soja, a partir del próximo lunes 27 de enero y hasta el 30 de junio de 2025. La medida fue dada a conocer por el vocero presidencial, Manuel Adorni, y el ministro de Economía, Luis Caputo, en una conferencia de prensa.
La reducción de las alícuotas tiene como objetivo aliviar al sector agropecuario, que enfrenta un contexto de baja de los precios internacionales de los commodities, que han tocado su mínimo histórico, y una alta carga tributaria. En particular, la retención a la soja disminuirá del 33% al 26%, mientras que otros productos como el trigo, maíz, cebada y girasol también verán reducciones de hasta un 3,5%.
En específico, la retención a la soja, uno de los pilares de la economía nacional, bajará del 33% al 26%, mientras que los derivados de la soja, como el aceite y la harina, verán una disminución del 31% al 24, 5%. En el caso del trigo la baja irá del 12% a 9,5%; en la cebada de 12% a 9,5%; para el sorgo será de 12% a 9,5%; para el maíz de 12% a 9,5%; y en el caso del girasol irá de 7% a 5,5%.
Por otro lado, el Gobierno también ha decidido eliminar permanentemente las retenciones para las economías regionales, que incluyen productos como el arroz, el azúcar, el algodón, el tabaco y el cuero bovino, entre otros. Esta medida, que beneficiará a los productores de diversas provincias argentinas, busca dar un impulso a la producción de estos sectores, que históricamente habían estado desprotegidos frente a las políticas fiscales.
Razones Detrás de la Baja Temporal de Retenciones
La decisión del Gobierno se enmarca en un contexto complicado para el sector agropecuario, que enfrenta dificultades debido a la sequía y la caída de los precios internacionales de los commodities. A pesar de que las retenciones han sido una fuente importante de ingresos fiscales, el ministro de Economía, Luis Caputo, explicó que la reducción temporal de las mismas responde a una necesidad urgente de apoyar a los productores en un momento crítico. “Estamos tomando esta medida porque entendemos que hay una situación particular en el campo debido a la sequía y la caída de los precios internacionales. No podemos hacer una reducción permanente de las retenciones, ya que el país todavía no cuenta con los recursos necesarios”, indicó Caputo.
A pesar de que las retenciones seguirán siendo un tema de debate, el Gobierno destacó que esta reducción temporal representa un paso importante para aliviar la carga fiscal sobre los sectores productivos, en línea con las promesas de campaña de Javier Milei, quien ha señalado en varias ocasiones que el campo es una prioridad para su gobierno.
El Impacto en las Economías Regionales
Una de las principales novedades de la medida es la eliminación permanente de las retenciones para las economías regionales. Este cambio ha sido recibido con entusiasmo por los productores de estos sectores, que históricamente han enfrentado mayores dificultades para acceder a los beneficios fiscales. Al eliminar las retenciones para productos como el arroz, el tabaco, el algodón y el azúcar, el Gobierno busca fomentar la competitividad de estos sectores, que juegan un papel clave en la generación de empleo y en la economía de muchas provincias argentinas.
“El campo argentino es una prioridad para este Gobierno, y esto no solo se dice, sino que se demuestra con hechos. Vamos a eliminar de manera permanente las retenciones para las economías regionales, lo que representa una medida muy importante para estos sectores que nunca antes habían recibido el mismo tratamiento que los cultivos más grandes”, expresó el vocero presidencial, Manuel Adorni, en la conferencia de prensa.
El Compromiso con la Baja de Impuestos
La reducción de las retenciones es parte de un compromiso más amplio del Gobierno con la disminución de los impuestos, un eje central de la campaña electoral de Javier Milei. El ministro Caputo destacó que, aunque no se pueden eliminar todas las retenciones de manera inmediata debido a la situación fiscal del país, esta medida representa un paso hacia la simplificación tributaria y la mejora de la competitividad del sector agropecuario. “Este Gobierno vino a reducir los impuestos, y lo estamos demostrando con hechos. Aunque aún no tenemos los recursos para eliminar todas las retenciones, seguimos trabajando en ese camino”, aseguró Caputo.
Un Alivio Necesario para el Sector Agropecuario
La medida ha sido bien recibida por los productores agropecuarios, que habían estado pidiendo una baja en las retenciones debido a las dificultades derivadas de la sequía y la caída de los precios internacionales de los commodities. Sin embargo, algunos analistas advierten que, aunque la medida aliviará la presión fiscal, las condiciones estructurales del sector agropecuario seguirán siendo un desafío. El alto costo de los insumos, la falta de infraestructura y la inestabilidad económica son algunos de los factores que continúan afectando la rentabilidad de los productores.
A pesar de estos desafíos, la reducción temporal de las retenciones y la eliminación de las mismas para las economías regionales son vistas como un primer paso positivo en la política agrícola del Gobierno. Con el fin de mejorar las perspectivas para el campo, muchos consideran que estas deberían ir acompañadas de otras políticas que favorezcan la inversión en infraestructura y la mejora de medidas en la competitividad del sector.
La decisión del Gobierno de reducir temporalmente las retenciones a los cultivos agrícolas clave y eliminar las retenciones a las economías regionales es un paso importante hacia el alivio de la carga fiscal que enfrenta el sector agropecuario en Argentina. Aunque la medida está enfocada en un período temporal, muestra el compromiso del Gobierno con el sector agrícola y con la reducción de impuestos, uno de los pilares de la campaña de Javier Milei. Las expectativas del sector agropecuario son altas, y muchos esperan que este sea solo el comienzo de un proceso más amplio de apoyo y reactivación para el campo argentino.