Cada 26 de noviembre, como es tradición en Argentina, se celebra el Día del Químico, una fecha especial dedicada a honrar a los profesionales de la química y su contribución a la vida diaria de las personas.
La razón detrás de la conmemoración se remonta a la figura de Enrique Herrero Ducloux, quien fue el primer doctor en Química del país. Ducloux obtuvo su título en la Universidad de Buenos Aires en 1901, marcando un hito en el desarrollo de la disciplina en Argentina. Además, en 1919, asumió el cargo de decano de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Nacional de La Plata, consolidándose como una de las figuras más destacadas de la ciencia argentina a principios del siglo XX.
Este día se celebra para recordar su legado y su invaluable aportación al campo de la química, que sigue siendo fundamental en diversos aspectos del desarrollo científico, tecnológico.
Agencia MTR