Se celebra este viernes 20 el Día del Jubilado, una fecha significativa que recuerda la sanción de la primera ley jubilatoria en 1904. Esta normativa no solo marcó un hito en la historia del país, sino que también estableció derechos fundamentales para millones de personas que han contribuido al desarrollo social y económico del país a lo largo de su vida laboral.
La ley n° 4349, promulgada durante la presidencia de Julio Argentino Roca, otorgó beneficios previsionales a empleados públicos y sentó las bases para un sistema de aportes jubilatorios. Con el tiempo, este sistema se amplió a otras categorías laborales, mejorando la seguridad social en Argentina.
Hoy, más de 7 millones de jubilados y pensionados reciben haberes por sus aportes, un número que ha crecido significativamente desde 2001. Las estadísticas de la ANSES revelan que el 95% de las personas mayores en el país cuenta con algún tipo de ingreso previsional, lo que subraya la importancia de estas políticas para una vida digna.
La conmemoración del Día del Jubilado también busca visibilizar la lucha por los derechos de este grupo. Es fundamental garantizar no solo el acceso a pensiones adecuadas, sino también a servicios de salud y a un entorno que respete su dignidad y bienestar. Según la Convención Interamericana sobre la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores, es responsabilidad del Estado asegurar que todos los ciudadanos tengan acceso a una jubilación digna.
En un país donde la jubilación es un pilar esencial para la vida de muchos, hoy se hace un llamado a la sociedad y al gobierno para continuar defendiendo y fortaleciendo estos derechos. Celebramos a quienes han trabajado incansablemente y merecen vivir su retiro con tranquilidad y respeto.