Mariano Navone, el joven tenista nuevejuliense, está viviendo un sueño hecho realidad en los Juegos Olímpicos de París 2024. A sus 23 años, el deportista argentino, nacido de la Escuela de Tenis del Club Atlético 9 de Julio, de las lecciones de Guillermo Cristóbal, ex-combatiente y héroe en Malvinas, ha tenido un ascenso meteórico en su carrera.
Después de su primer gran triunfo en el circuito, en Río de Janeiro, y de destacarse con una victoria en un Grand Slam, Navone ha conseguido posicionarse entre los mejores del tenis mundial.
En París, Navone está experimentando la Villa Olímpica y esta tarde navegó el Río Sena con una bandera celeste y blanco; y se siente como si estuviera en un sueño, con una mezcla de emoción y nostalgia por cumplir un deseo que alimentó desde pequeño.
Y para su debut, este sábado a las 7,30 hora argentina, el tenista que lleva su tierra nuevejuliense bien alto, se enfrenta a Nuno Borges, un rival enérgico que acaba de ganar su primer título en Bastad al vencer a Rafa Nadal. Aunque no hay enfrentamientos previos entre los dos jugadores, Navone reconoce la calidad de Borges y anticipa un partido complicado y emocionante.
La atmósfera en la Villa Olímpica es única y Navone, apasionado del olimpismo, está disfrutando de cada momento. Además de prepararse para su competencia, el argentino está entusiasmado por apoyar a sus compatriotas en otros deportes, como el vóley, el handball, el hockey sobre césped y el baloncesto.
Mientras se ajustan los últimos detalles para la ceremonia inaugural, Navone saborea el espíritu olímpico y la oportunidad de ser parte de este evento histórico. Su presencia en los Juegos Olímpicos de París no solo representa un logro personal, sino también un momento de orgullo para el tenis argentino.
Agencia MTR