La forma de detectar en forma temprana algunos tipos de cáncer son molestos e invasivos, amén que precisan de equipamiento específico. El cáncer de mama, el colorrectal o el de próstata (el cáncer de colon en nuestro país es el segundo en prevalencia y mortalidad), son algunos de ellos.
Nuevamente científicas y científicos Argentinos, están haciendo punta en algo tan importante para la detección temprana de esta enfermedad.
En el Instituto de Biología y Medicina Experimental (IBYME) del Conicet y de la Universidad de San Martín (UNSAM), desarrollaron un test, que a partir de una muestra de sangre, mide la presencia de “microRNAs”, pequeñas moléculas que son bio-marcadores de la presencia de un tumor, liberadas por las células tumorales apenas comienzan a producirse.
El equipo investigadores del CONICET, informó este viernes que avanza en el desarrollo del test Oncoliq, para la detección precoz del cáncer de mama, de mayor incidencia en mujeres, y de próstata, de mayor incidencia en hombres, que apunta a “reducir las tasas de mortalidad de esos tumores mediante su identificación temprana con un simple análisis de sangre”.
“A partir de esta muestra de sangre se utilizaría la técnica de PCR en tiempo real para detectar los microARNs y luego aplicando un algoritmo se informaría al individuo el resultado del ensayo. Es un test muy similar al del Covid-19”, explican los científicos argentinos.
La directora del proyecto dijo: “Oncoliq es de fácil implementación y permite detectar tempranamente el cáncer con alrededor de un 90% de sensibilidad, lo cual reduciría la mortalidad por cáncer y mejoraría la calidad de vida de los y las pacientes”.
La primer validación del test se realizó en 100 pacientes con cáncer, 100 voluntarios y voluntarias sanos/sanas.
Se realizó la validación también en procesar con bioinformática datos de bases públicas de 2000 pacientes y voluntarios sanos en poblaciones asiáticas, confirmando la utilidad del test a nivel global.
Se realizan pruebas piloto en el Hospital Posadas, Hospital Militar, Hospital Melchor Posse, Sanatorio Otamendi, Cemafe, Instituto Alexander Fleming y Hospital Bernardo Houssay. En los cuales hay enrolados 450 voluntarias para mama y 750 voluntarios para próstata. El objetivo es llegar a los 1000 reclutadas/reclutados para cada tipo de cáncer.
Con esta prueba piloto se quiere comprar la eficiencia de Oncoliq respecto de los métodos convencionales.
Si estos dos tipos de tumores son detectados tempranamente, y están confinados en el órgano, el tratamiento es mucho menos agresivo en comparación con lo que se detecta tardíamente. El objetivo es que se aplique a las personas que van a realizarse su control ginecológico o urológico anual.
“Es realmente emocionante saber que el trabajo de muchos becarios y estudiantes ha generado este test y actualmente exista esta Start up llamada Oncoliq que está generando, además de conocimiento de calidad, nuevas fuentes de trabajo para doctorados del mismo sistema científico”, expresa Adriana De Siervi, doctora en Biología, investigadora del Conicet y directora del IBYME, que lidera el proyecto junto a Marina Simian, investigadora del Conicet y directora del Laboratorio de Nanobiología del Instituto de Nanosistemas de la UNSAM.
El proyecto para desarrollar Oncoliq contó con subsidios de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), el Instituto Nacional del Cáncer del Ministerio de Salud, la Fundación Williams y SF500, una iniciativa de Bioceres, la Provincia de Santa Fe y diversos actores que busca transformar investigadores e investigadoras en fundadores de startups en Ciencias de la Vida, concluyeron.