Los administradores de empresas agropecuarias enfrentan a diario numerosas variables: el clima, las políticas gubernamentales imprevisibles, la carga administrativa, los precios internacionales de venta de sus productos, así como de sus costos.
Los factores que afectan a los productores, son internos y externos. Con los externos no se puede hacer nada porque no dependen de ellos, pero con los internos si, entonces conocerlos y cumplirlos trae grandes ventajas, o reducen problemas.
Existen muchas normas específicas del sector, los contadores que asesoran a productores deben conocerlas, pero también necesitan saber de ellas las personas que conducen estos negocios para poder brindar información a tiempo a sus asesores.
La omisión de inscripción en estos dos registros, ocasiona altas retenciones de impuesto al valor agregado (IVA) o impuesto a las ganancias, u otras complicaciones como no poder obtener cartas de porte para el transporte de sus granos.
¿Cuáles son los registros específicos del sector agropecuario?
En cuanto al sector Agrícola:
Los productores de granos y semillas, así sea su actividad primaria o secundaria, se deben inscribir en el Sistema de Información Simplificado Agrícola – SISA-, y realizar dos declaraciones sobre sus producciones durante el transcurso del año, de manera online ante AFIP (Administración Federal de Ingresos Públicos), antes de este registro debían hacerse siete declaraciones.
La IP1 (o información productiva uno), y se realiza durante el mes de octubre de cada año, indicando las existencias que tengan los productores al 30 de septiembre, y la superficie agrícola destinada a cultivos de invierno o de cosecha fina, en nuestra zona los más conocidos trigo y cebada.
La IP2 (o información productiva dos) desde el primero de diciembre hasta el 28 de febrero de cada año, se informa la superficie agrícola destinada a los cultivos de verano, también llamados de cosecha gruesa, estos son: algodón, amapola, amaranto, arroz, chía, girasol, lupines, maíz, maní, poroto, quínoa, sésamo, soja, sorgo y otros granos considerados dentro de este grupo.
La presentación se realiza con CUIT (Código único de Identificación Tributaria) y clave fiscal, la realizará tu contador, luego de ingresada el sistema emitirá por cada presentación la constancia respectiva. Si hubiera errores o inconsistencias, la declaración será rechazada automáticamente por el sistema.
Toda comunicación que quiera realizar AFIP al contribuyente productor la realizará de manera online al DFE (Domicilio Fiscal Electrónico).
Para informarte más sobre este registro ingresa al siguiente enlace https://soundcloud.com/ipit-cpba/sisa-dra-mariana-lucarelli?utm_source=clipboard&utm_medium=text&utm_campaign=social_sharing
En cuanto al sector pecuario:
Los productores y todo aquel que intervenga en la cadena productiva, debe empadronarse en el Registro Fiscal de Operadores de la Cadena Cárnica, de la Administración Fiscal de Ingresos Públicos (AFIP), con CUIT y clave fiscal.
Aquí se encuentran comprendidos el Registro Fiscal de Operadores de la Cadena de Producción y Comercialización de haciendas y carnes Bovinas y Bubalinas – RFOCB- y el Registro Fiscal de Operadores de la Cadena de Producción y Comercialización de haciendas y carnes Porcinas– RFOCP.
Los sujetos a inscribirse son: los productores, criadores, cabañeros, feedlots, invernadores, consignatarios, comisionistas, frigoríficos, establecimientos faenadores, matarifes y mercados concentradores que operen en el sector ganadero. Esta obligación no recae sobre los transportistas de hacienda.
Para información adicional sobre este registro ingresa al siguiente link https://soundcloud.com/ipit-cpba/operadores-de-la-cadena-carnica-dra-mariana-lucarelli?utm_source=clipboard&utm_medium=text&utm_campaign=social_sharing
La permanencia estará condicionada a que el contribuyente mantenga una correcta conducta fiscal.
Si bien el empadronamiento a este último registro es optativo, la no inscripción o la exclusión, trae perjuicios fiscales, porque se elevan los pagos a cuenta, percepciones, o retenciones en cuanto al impuesto al valor agregado.
Tener conocimientos sobre los aspectos impositivos y legales de la actividad económica que se desarrolle, cualquiera sea, siempre añadirá valor a tu empresa.