En esta nota de oro para mi, ya que es la publicación número 50 de la columna que escribo cada miércoles para Cadena Nueve, quiero presentarles a una persona muy especial, con la que tuve el gusto de hablar en una entrevista muy amena, y quiero compartirla con ustedes en dos partes, para poder contarles más detalles sobre ella y su profesión.
Carolina es Contadora Pública y Coach Ontológica Profesional, con un posgrado en Dirección y Conducción Empresarial en la Universidad de Belgrano, busca promover el desarrollo potencial de las personas, de los equipos y de las organizaciones, siendo docente de cursos de manera presencial en Argentina y de manera virtual para América Latina por medio de la academia B&D Gestión Empresarial.
La Coach recibe mensajes de WhatsApp como este: “te quería decir, porque no te lo dije hoy, yo después de hacer el curso, comencé a estudiar, pude dar ese paso, darle una vuelta diferente a mi profesión, por eso es importante que se difunda el proceso del Coaching, a mi me ayudó mucho, a realizar ese cambio que tanto miedo me daba”
Entonces, para los que no saben lo que quiere decir esta palabra, le pedí a Carolina que defina qué es el Coaching Ontológico y cómo puede ayudar a una persona a dar ese paso que tanto miedo le ocasiona.
“El Coaching Ontológico es una disciplina emergente que asiste a las personas al logro de objetivos.
¿Cómo lo hace?
“Generando espacios que promueven el aprendizaje y el cambio. El coachee (persona que recibe los servicios del coach) en un espacio cuidado y de absoluta confidencialidad, y motivado por la escucha activa del coach, realiza un proceso de autoindagación, de autorreflexión, de autoconocimiento, y es allí en donde comienza a descubrir sus recursos y sus fortalezas.
¿Por qué es Ontológico?
“Ontología es el estudio del Ser.
En Occidente implica un cambio de paradigma importante, ya que aquí siempre se le dio mucha importancia a los resultados (tener), que son fruto de las acciones (hacer), que ejecuta un determinado observador (ser). Entonces, en función de lo que tenemos, es lo que podemos hacer, y esto nos determina lo que somos.
Gracias a la influencia de la cultura oriental este orden se invierte. Se ve la importancia y la trascendencia de cultivar el Ser, es decir, el observador que estoy siendo, indagando en mis modelos mentales, en mis creencias, en mi forma de ver el mundo. Este Ser es el que hace y, en función de ello, es lo que tiene.
Es decir que yo, cambiando mi Observador, voy a cambiar mis acciones y por lo tanto, los resultados que obtengo. Éste es el cambio que propicia el Coaching Ontológico.”
¿Por qué nos resistimos a cambiar en cualquier ámbito de nuestra vida?
“En mi opinión nos resistimos al cambio, porque nos sentimos cómodos en donde estamos porque ya nos acostumbramos y porque nos genera tranquilidad lo que ya conocemos, por más que esto nos haga sufrir o padecer.
Hacer algo distinto nos da miedo ya que no sabemos si va a resultar bien. E implica incursionar en terrenos desconocidos, y como no sabemos cómo nos puede ir, muchas veces preferimos no arriesgarnos, por las dudas nos vaya mal. ¿Y si nos va bien?
En las organizaciones el cambio también cuesta, se automatizan los procesos y se requiere para la efectividad, pero también es recomendable la mejora continua, es decir, ir revisando si es necesaria la implementación de cambios.
¡Y en las personas pasa lo mismo! Automatizamos procesos, por una cuestión de economía neuronal. El caminar, el hablar, hasta lavarnos los dientes o conducir un vehículo, lo hacemos de forma inconsciente. También hay otras acciones, como nuestra forma de conversar, con nosotros y/o con los otros, que, a lo mejor, podemos cambiar, Y, al hacerlo de manera distinta, vamos a obtenemos resultados diferentes.
Carolina es sanjuanina, actualmente está radicada en Mendoza, y cuenta esta anécdota para ejemplificar el proceso de Coaching Ontológico, al buscar a su hija a un barrio privado: “al llegar al lugar de control, encuentra un cartel con las siguientes instrucciones: 1- Detenga el motor de su vehículo. 2- Apague la luz exterior. 3- Encienda la luz interior. 4-Identifiquese. Esto la llevó a pensar la importancia de este proceso en la vida misma. Detener el motor, es parar, detenerse. Apagar la luz exterior, silenciar por un momento los mandatos, lo que tenés que hacer, las obligaciones por un momento. Encender la luz interior es conectarnos con nosotros mismos, y por último identificarse: ¿quién soy?
Que fuerte mensaje si lo pensamos. Muchas veces es necesario este proceso y el coaching ontológico lo promueve, para poder tener esa reunión con uno mismo”.
Podrías contarme sobre el valor de las palabras y la forma en que hablamos.
“El lenguaje crea realidades, hace que las cosas pasen.
Muchas veces no somos conscientes del poder que tiene esa herramienta que usamos diariamente, en los distintos ámbitos de nuestras vidas.
Las palabras no son inocentes, con una palabra puedo motivar o herir a una persona, o mí misma. Con nuestras conversaciones podemos construir puentes o muros. Entonces, cambiando nuestra forma de conversar podemos cambiar nuestra vida. Conversar de una manera distinta, para obtener resultados distintos.
Y si buscamos un cambio más profundo, podemos reflexionar sobre el observador que hoy estamos siendo, sobre nuestras creencias, ¿nos limitan? ¿o nos empoderan?”.
Para concluir esta parte, que mensaje te gustaría dejarnos:
“Tomar conciencia de nuestras palabras. El lenguaje es muy poderoso, hace que las cosas pasen. Entonces, desde esta distinción y asumiendo nuestra responsabilidad, elegir qué tipo de conversaciones promuevo y genero. ¿Conversaciones que generan bienestar, optimismo y esperanza? ¿O conversaciones que generan conflicto y malestar? Siempre podemos elegir…”
El Coaching es desconocido por muchas personas, puede darse con un profesional en un espacio cuidado, o con un amigo, o simplemente sentándose en una plaza, con mate en mano, parar y reflexionar, hablarnos diferente, de forma más amable, muchas cosas pueden cambiar.
Para conocer los trabajos realizados por Carolina Salas Villegas podés ingresar a su página web https://carolinasalasvillegas.com/ o por sus redes sociales: en Instagram @carosalasvillegas, en Facebook Carolina Salas Villegas.