Más de la mitad de las jurisdicciones del país deberán dirimir candidaturas por la pelea de fondo entre el radicalismo y el PRO o divisiones incluso en el interior de esos dos partidos.
La competencia en la PASO es considerada como una medición de liderazgos de cara al 2023, donde además de los cargos legislativos, están en juego los ejecutivos.
Mientras este domingo en Nueve de Julio el radicalismo hizo pública la lista que oficializó, y encaza Ignacio ‘Nacho’ Palacios, el PRO, que también tenía previsto hacerlo, decidió que la nómina de sus canddiatos sea conocida este lunes. Recordemos que la lidera Raúl Zapata.
La alianza Juntos por el Cambio o Juntos, se prepara para competir en más de la mitad de las jurisdicciones del país, con una disputa de fondo entre el radicalismo y el PRO por redefinir los términos de la coexistencia en esa coalición y definir liderazgos mirando el 2023.
En algunos casos se producirá una competencia abierta entre la UCR y el PRO, como en la provincia de Buenos Aires y en otros habrá disputas hacia el interior de esos dos partidos -donde distintas líneas pulsean por quién tomará el control de una u otra fuerza.
Y en Nueve de Julio, está claro que la Unión Cívoca Radical, no solo a las urnas, mide poder se la fuerza gravitante para que un nombre se ese sector sea el intendente 2023, ya que finaliza su mandato Mariano Barroso, líder indusctible del espacio.
Así, Juntos por el Cambio o Juntos, conforme a la jusrisdicción o provincia, pondrá en juego no solo bancas, sino los alineamientos de cara a la elección presidencial de 2023.
Agencia MTR