Cada 16 de abril se celebra el “Día Mundial de la Voz”, realizándose una campaña que busca concienciar a la población sobre la importancia de la salud vocal para la comunicación, incentivando la consulta temprana ante cualquier síntoma relacionado con la voz.
La laringología es la subespecialidad de la Otorrinolaringología que se ocupa de las enfermedades de la laringe y, por tanto, de los problemas de la voz (disfonía y afonía).
Al ser un órgano que se encuentra entre las vías respiratorias y el aparato digestivo puede verse influenciado por patologías de diversa índole y su alteración puede provocar además problemas respiratorios y deglutorios como la odinofagia y la disfagia.
Hemos comentado que los dos problemas principales de la voz son la afonía y la disfonía, ¿Pero sabemos realmente qué son y diferenciar ambos términos?
¿Qué es la afonía?
Vamos a empezar por la más grave de las dos, la afonía.
La afonía se da cuando nos quedamos directamente sin voz o bien cuando esta suena con un susurro muy bajo. La afonía se puede producir de forma gradual o inmediata, y entre sus causas principales encontramos siempre problemas de laringe.
La afonía se produce por un uso excesivo de las cuerdas vocales, por gritar muy fuerte o por algunas alteraciones de la laringe que también puedan estar provocando este problema.
La sintomatología es un molesto dolor de garganta que simula el de un resfriado o al de una gripe.
Causas de la afonía más frecuentes
Entre las causas más comunes de la afonía se encuentran:
- Enfermedades del aparato respiratorio como faringitis, laringitis, amigdalitis, alergias, tos persistente, tumores o nódulos.
- Mal uso de la voz: forzarla demasiado, por trabajo o entretenimiento.
- Productos irritantes o tóxicos: el tabaco, el alcohol, la pimienta, el vinagre, los productos químicos o abrasivos.
- Nervios: Después de un cuadro de enfado, muchos gritos de rabia, nervios por un evento en particular, etc…
- Tras una cirugía de laringe u otros procedimientos médicos. También por traumatismos ocasionados por accidentes.
- Frío excesivo: Si nieva o la temperatura está bajo cero y estamos desabrigados, así como también por la ingesta de bebidas demasiado frías
- Otras causas: bocio, difteria, parálisis en las cuerdas vocales, enfermedades crónicas que debilitan el tono muscular.
¿Qué es la disfonía?
La disfonía puede ser debida a una incorrecta utilización de la voz, en forma de excesiva tensión de las estructuras de la laringe a la hora de producir la voz, un exceso de energía que se traduce en microtraumatismos en las cuerdas vocales, inflamación y la posibilidad de la aparición de lesiones orgánicas en el borde de las cuerdas vocales, tales como nódulos o pólipos.
Causas de la disfonía más frecuentes
El abuso vocal como el que se da entre los profesionales de la voz, tanto en aquellos que tienen que utilizar la voz muchas horas al día como en el caso de profesores, telefonistas, vendedores, cantantes, etc…, es otra de las causas.
También se da en aquellos que trabajan en un entorno ruidoso, por lo que el volumen de su voz habitual sobrepasa las posibilidades del sistema fonatorio (como ocurre en ciertas fábricas, mercados, profesionales que trabajan con niños, etc.).
Otros factores que inciden en la alteración de la voz
- El tabaco es, sin duda, otra de las causas que producen alteraciones en la voz,por la irritación e inflamación crónica que se produce en las cuerdas vocales. Su uso puede también producir cambios degenerativos en el revestimiento de la laringe e inducir a la aparición de lesiones cancerosas.
- El abuso del alcohol y de licores con una alta concentración del mismo, sobre todo si va unido al consumo de tabaco, pueden producir efectos irritativos en la mucosa que recubre la faringe y la laringe.
- El estado general de la persona es otro factor importante.La producción de la voz es un fenómeno muy complejo en la que intervienen diversos sistemas del organismo que deben estar sanos y coordinados para que la fonación sea correcta. La baja forma vital, el cansancio, el estrés, los estados de ansiedad y nerviosismo habitual predisponen al mal uso vocal y disminuyen la resistencia del sistema fonatorio.
- Las patologías infecciosas del árbol respiratorio, como las sinusitis, bronquitis crónicas, amigdalitis…pueden producir una inflamación de la mucosa de las cuerdas vocales, aumentando la posibilidad de la aparición de lesiones.
- Lo mismo ocurre en pacientes con alergias respiratorias y en pacientes con reflujo gastroesofágico. En estas últimas aparecen síntomas digestivos como acidez, ardores, pesadez del estómago y esófago y síntomas laríngeos como ronquera matutina, tos, y aclaramiento vocal frecuente.
- Algunas enfermedades del sistema nervioso también pueden predisponer a la disfoníapor alterar la fina coordinación precisa por diversas estructuras en la producción de la voz, como ocurre en el caso de la enfermedad de parkinson, esclerosis lateral amiatrófica o en la disfonía espasmódica.
Exploración de la función vocal
En cuanto a la exploración de la función vocal, esta consiste en:
- Una valoración subjetiva de la voz por el propio médico.
- Un análisis objetivo de la misma, mediante la utilización de diversos sistemas de análisis acústico de las variables fisiológicas de la voz.
- La visualización de las estructuras del sistema fonatorio, especialmente de las cuerdas vocales, mediante diversos métodos de endoscopia.
Y recuerda, ante cualquier problema que detectes relacionado con tu voz no dudes en acudir a tu otorrinolaringólogo de referencia.