Hace 10 años, un colombiano presentó en el Primer Congreso de Gestión Cultural celebrado en Santiago, Chile, instaurar el 1° de agosto como Día Internacional de la Alegría.
El impulsor, Alfonso Becerra, señaló que uno de los mejores sentimientos que se pueden percibir en la vida, es el sentirse alegre, pues esta sensación provoca tener un buen ánimo, sonreír, disfrutar las cosas, entre otras bondades.
El objetivo que se trazó es de hacer pensar sobre ese sentimiento que genera bienestar emocionalmente hablando y así tratar de mantenerlo todos los días.
Becerra resaltó que si existen días para conmemorar días históricos, políticos, religiosos, comerciales, deportivos, entre otros, era necesario reconocer este sentimiento que le hace bien a todos los seres humanos.
Este día se celebra en al menos 14 países del mundo, pero conforme van pasando el tiempo cada vez se va universalizando.