La fecha revaloriza la importancia de la educación de jóvenes y adultos para la formación personal y una mejor inserción en la comunidad de pertenencia.
Un informe elaborado por la UNESCO sostiene que el 23 por ciento de la población adulta mundial es incapaz de leer, escribir o realizar operaciones matemáticas elementales. Además, advierte que la enseñanza para jóvenes y personas mayores carece de la necesaria vinculación con el mundo del trabajo.