“Militantes es aquel que intenta transformar el mundo con su ejemplo”, nos decía Arturo Jauretche. Se nos ha ido un gran ser humano, Padre de familia, abuelo, y mucho más, pero sobre todo “Un fiel Militante de nuestra causa Peronista”.
Aunque no éramos amigos íntimos, si existía un respeto y admiración mutua, por las luchas justas, y así, lo quiero recordar a Pepe, aun en las adversidades jamás bajo la bandera del Peronismo, jamás fue confundido por el poder o el dinero, rico de una honestidad, solidaridad admirables. Me quedo con una anécdota que sucedió halla por una campaña, siendo candidato, teníamos poco dinero para la misma, era todo a pulmón, yo joven, Pepe( Junto a Marta, siempre!) entrado en años, en una charla les explicaba que no podíamos hacer los pasacalles, y el con su voz pausada, se acercó y me dijo: “ Josesito yo y marta nos encargamos”, al otro día fui hasta su casa, y vi lo que es el amor de un Militante, los dos juntos estaban arrodillados pintando los pasacalles con mi nombre, y me dijo” Te gustan josesito”?, comprendí que era una gran clase de lo que es ser Militante, y ahí lo empecé a entender, comprender, querer. El pasaba así de la humildad, al abrazo del alma.
Formo una gran familia “Los Rizzo”, hijos nietos, bisnietos, junto a su entrañable compañera de causas Marta. Y la formo con trabajo, honestidad, militancia y mucho más, sabiendo que detrás o delante de este camino existió esa compañera fiel. Y transmitió su sangre Militante.
Reconocer al viejo Militante, no con el “viejo”, como peyorativo, sino como sabio, como compañero de lucha incansable, intachable, con lealtad eterna. Ese que no solo viene desde ese noviembre del 72, sino también de aquel que creció en dictadura y retomó las banderas luego de 1983. Que en el medio se bancó esas mezclas raras de ciertos dirigentes renegados e ingratos que confundieron el verdadero sentir peronista. Quizás no pudieron, no los dejaron o no quisieron. Ese militante que hoy ve que esa tenue luz, de una vez por todas llegue a iluminarnos plenamente. Que esa utopía de un país con más igualdad, equidad y plena democracia era posible. Es posible. Esos militantes peronistas, que lucharon y luchan con sincero entusiasmo, tenacidad y sacrificio, animados por un auténtico ideal partidario. Que supieron entregarse enteramente, a una causa política, y en más de una ocasión fueron víctimas de la intolerancia, las persecuciones, la cárcel, la muerte, la desaparición. Todos, juntos y organizados deben reconocerse hoy por la lealtad, el fervor, la humildad, el compañerismo, el calor popular, la solidaridad, la predisposición, la entrega, la lucha; en el triunfo, y también, en la derrota… Porque son y serán, toda la vida, siempre fieles, y por siempre, militantes. Ese querido Pepe, has sido vos, así de simple, sin buscar honores, sin pretender tarimas, solo con el abrazo de un compañero te alcanzaba, algo que pareciera empezamos a recuperar todas y todos juntos.
Antes de tu partida, pudiste saber que Volvimos, y eso es tuyo también!!
Fuiste un Militante peronistas, militante de la vida. Militante, en busca de la transformación y dando el ejemplo.
Seguramente me queda la deuda de muchas más tarde aprendiendo Peronismo con vos, pero me queda tu enseñanzas: Honestidad, trabajo, lealtad, militancia.
Se te va a extrañar Pepe Rizzo, ese fiel Militante Peronista!.
Compañero José M Giuliodoro