En el partido correspondiente a la ida de octavos de final, Agropecuario derrotó a Sol de Mayo de Viedma por 2 a 0. El “sojero” se impuso con tantos de Alejandro Aguirre en la etapa inicial y Germán Salort, de penal, en el complemento y sacó una buena diferencia para definir como visitante.
El objetivo era sacar una buena diferencia y también evidenciar una supuesta superioridad futbolística. Y Agro logró su cometido. El conjunto casarense se impuso por 2 a 0 ante Sol de Mayo de Viedma y el resultado quedó un poco “corto” por lo visto dentro del campo de juego.
En el comienzo del partido, los dos equipos se midieron, progresaron poco en el campo de juego y solo avanzaron mediante algún balón detenido. El desarrollo era monótono pero, a los 15’, Agropecuario sorprendió a su rival: la defensa visitante dejó corto un rechazo, Aguirre habilitó a Urquijo, entre los defensores y el arquero taparon la definición del goleador casarense, pero el balón le quedó servido a Aguirre, quien prácticamente empujó la pelota a la red para poner el 1 a 0.
Con la diferencia a su favor, el elenco local mejoró en la distribución de la pelota y siguió atacando por los costados, aprovechando la pasividad de los volantes y defensores rionegrinos. Así, Blando ganó muchas veces por el costado derecho y se transformó en la “llave” para desnivelar el partido.
Sol de Mayo sorprendió por sus desajustes en defensa y también por sus pocas ideas a la hora de intentar inquietar a Germán Salort.
Así, el conjunto “sojero” contó con chances de estirar la cuenta en los pies de Gonzalo Urquijo y el propio Brian Blando pero no estuvo fino en la definición y se fue al descanso ganando por un gol.
El segundo tiempo mostró un equipo casarense muy superior y decidido a llevar una diferencia mayor al encuentro de vuelta en Viedma. En esta etapa, el equipo de Adrián Adrover monopolizó el control de la pelota y lastimó constantemente con las fructíferas apariciones de Maximiliano Herrera por izquierda y Brian Blando por derecha. Ambos se asociaron bien con Aguirre y Urquijo y las jugadas de peligro cayeron una tras otra, pero el conjunto casarense no andaba derecho en la definición. En la más clara, Urquijo le ganó de cabeza al arquero y, cuando el testazo del delantero se estaba por convertir en gol, un defensor despejó el balón en la línea.
Pero tanto fue el cántaro a la fuente que al final se rompió. A los 34’, Blando desbordó por la derecha, sacó el centro al área pero su envío dio en la mano del volante Favarel por lo que el árbitro sancionó penal. Germán Salort ejecutó con eficacia y convirtió el segundo tanto de Agropecuario.
Tras el gol, Sol de Mayo intentó salir de su propio campo pero demostró demasiadas limitaciones a la hora de generar juego asociado. Además, la defensa y el mediocampo casarense mostraron coordinación y concentración para abortar cualquier intento visitante y Agro no pasó sobresaltos.
De esta manera, Agropecuario redondeó un triunfo justo y por una buena diferencia, que le da cierta tranquilidad para planificar el cotejo de vuelta en Viedma. El equipo tuvo un buen funcionamiento tanto en ataque como en defensa y eso tranquiliza tanto como la diferencia de dos goles.
El cotejo de vuelta será dentro de siete días en Viedma, donde el conjunto casarense buscará la clasificación cuartos de final de este torneo Federal B.
SÍNTESIS:
Agropecuario (2): G. Salort, L. Vesco, W. Zunino, J. Todino, J. Manzoco, F. Urquiza, E. Díaz, C. Pontillo, G. Urquijo, A. Aguirre y B. Blando. DT: Adrián Adrover. Suplentes: M. Barufaldi, H. Azaguate, E. Zamprogna y A. Rabán.
Cambios: M. Herrera x L. Vesco / Ariel Reyes x B. Blando / F. Pascuttini x G. Urquijo.
Sol de Mayo (0): N. Astuti, J. Páez, A. Lobato, G. García, J. Favarel, L. Malacarne, S. Llambay, A. Russo, D. Galván, M. Olivera y D. Ríos. DT: Adán Valdebenito. Suplentes: M. Sotelo, I. Pizzio, Alberto Reyes y D. Coria.
Cambios: R Gargareli x A Russo / M. Ponce x M. Olivera / N. Conti x D. Ríos
Goles: PT. 15’ A. Aguirre (A) ST. 33’ G. Salort (A)
Árbitro: Diego Tadiello
Asistentes: Miguel Montoya y Rubén Ortiz
Agencia MTR